viernes, 9 de diciembre de 2011

Al mundo le falta un tornillo

Dicen que una vez hubo un tipo refinado que le gustaba soñar parado y de zapatillas blancas, esta costumbre valerosa, no era mas que una convicción a que lo imposible podía seguir siendo imposible y que lo falso era verdaderamente un logro mas que una culpa. Este señor contaba con la presencia de un atornillado carácter que lo podía poner a la izquierda de todo aquel que proponía enroscarle la vida con antítesis definidas como razones de una convulsión permanente debido a las mañas ajenas.
He aquí el comienzo de un recorrido, que  para muchos entendidos podría llamarse personalidad  definida, y para algunos el gran choque para la gilada. Este muchacho de mente abierta incursiono en el método metafísico de como mezclar un sentido con algo común. Debido a fracasos tras fracasos llego a la conclusión que un sentido puede ser común si lo que, comúnmente, se dispara se puede sentir en la cabeza de algún desprotegido cerebral, cosa que abundan en esta tierra fértil de ignorantes.
El tipo refinado se volcó a la observación de "quienes" , cuando se quedo sin ningún vestigio de guita en sus bolsillos y así pudo aprovechar los gustos que la mal llamada sociedad puso a sus pies como un tesoro que ni el pirata Morgan nunca descubrió, simpatía que lo puso a la vanguardia de los que no tienen propósito común o comúnmente llamados sinsentidos de un argumento que todavía nadie entendió.
Y como dice el tango: "Al mundo le falta un tornillo que venga un mecánico a ver si lo puede arreglar"


















miércoles, 7 de diciembre de 2011

El mundo en que vivis

Recuerdo cuando la espera era profunda y el abismo un corto espacio que definía entre la realidad y la sabiduría de un cosmos perpetuado por las costumbres de una relación espectral con el mundo que domina la exageración humana, una jerarquía poco probable dentro de un punto de vista admisible y/o borroso que se escapa de un pensamiento,-puede decirse global-, que enumera diversos sinsabores de una utopía desperdiciada y poco confusa. Es tal vez, una nostalgia desmoronante que uno va escribiendo bajo un destino improbable que cada ves es mas jactante y equivoco a la ves, pero esto no nada mas que una distancia entre la fantasía y la realidad, fantasía que irrumpe como una soga que te tiran para no desbordarte en la nada, sueños esos que nunca debiste haber dejado, los que nunca te mentirían porque son tuyos y los que te salvaron de una crisis que te podría llevar a cometer un suicidio cerebral continuo.
Y a eso me refiero, a la simpleza de los sueños, material intangible pero poderoso que se te mete en la cabeza cuando menos lo pensas y que cuando se cumplen parece que nunca lo deseaste u olvidas de donde salio esto. Pero eso si es bueno darse cuenta de que lo imposible esta en todos lados y que la ilusión puede ser tangible. Una cuota de delirio no le hace mal a nadie, Sabelo......A veces la molecula puede ser confusa pero es fiel.